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lunes, 2 de noviembre de 2015

¿Viviendo los tiempos de Sodoma y Gomorra?

Este siglo ha sido muy libertino en su manera de vivir, pero este acontecimiento no inicia en el siglo 21. A pesar de que se haya legalizado el matrimonio igualitario, sólo es una señal más para darnos de cuenta los tiempos que estamos viviendo. Muchos justifican sus acciones inmorales sacando textos Bíblicos de contexto y lo usan como pretexto.  Sodoma y Gomorra fue una ciudad que vivía de inmoralidad sexual y toda clase de abominación en contra de la naturaleza de Dios, su pecado fue tanto que llegó un clamor hasta la presencia de Dios (Génesis 18:20-22). Ya Dios para ese momento había constituido a la familia: “Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.” (Génesis 2:24), pero Sodoma y Gomorra habían pervertido todo principio constituido por Dios.

Ahora, ¿Cuáles fueron las consecuencias por vivir en inmoralidad?
“porque vamos a destruir este lugar, pues su clamor ha llegado a ser tan grande delante del SEÑOR, que el SEÑOR nos ha enviado a destruirlo.” (Génesis 19:13)

“y si condenó por destrucción a las ciudades de Sodoma y de Gomorra, reduciéndolas a ceniza y poniéndolas de ejemplo a los que habían de vivir impíamente” (2Pedro 2:6)

“Así también Sodoma y Gomorra y las ciudades circunvecinas, a semejanza de aquéllos, puesto que ellas se corrompieron y siguieron carne extraña, son exhibidas como ejemplo al sufrir el castigo del fuego eterno.” (Judas 7)

Los homosexuales de Sodoma estaban siguiendo “carne extraña” al querer tener sexo con otros hombres. “No te acostarás con varón como los que se acuestan con mujer; es una abominación.” (Levítico 18:22)

“Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza, y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío.” (Romanos 1:26-27)

“¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.” (1 Corintios 6:9-10)

Otros versículos sobre el matrimonio constituido por Dios:
Marcos 10:6 “Pero desde el principio de la creación, Dios los hizo varón y hembra.”
Hebreos 13:4 “Sea el matrimonio honroso en todos, y el lecho matrimonial sin mancilla, porque a los inmorales y a los adúlteros los juzgará Dios.”

Proverbios 18:22 “El que halla esposa halla el bien, Y alcanza la benevolencia de Jehová.”





Abraham Tovar.

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